OBJETIVO:
Analizarnos nuestra situación matrimonial, y si estamos en uno de estas descripciones, corregir nuestra situación.
INTRODUCCIÓN:
Hoy en día, es muy común, ver la destrucción de los
matrimonios, por diversas situaciones, y más aún, porque desde el inicio del
mismo, no se pide a Dios la compañera o compañero, para compartir el resto de
la vida, que Dios tenga asignada, a cada quien.
No se tiene la total convicción, de que significa el matrimonio en la
extensión completa de la palabra.
La palabra matrimonio, viene del latín:
"MATRIMONIUM", que quiere decir: Una institución social que crea un vínculo conyugal, entre sus miembros, con la
finalidad de constituir una familia.
La etimología de la palabra, viene del latín: “MATRIS”= madre y “MUNIUM”=gravamen o cuidado, de acuerdo a esto, seria cuidado de la madre, que
lacónicamente, sería, cuidado de la madre de la familia.
El emperador Justiniano, lo
describía como “La unión del hombre y la mujer con la intención de continuar la
vida en común”.
DESARROLLO:
1ª. De Corintios 11:3
“Pero quiero que sepáis que Cristo es la cabeza de todo
varón, y el varón es la cabeza de la mujer, y Dios la cabeza de Cristo”.
Porque nos referimos al hombre y no a la mujer, porque el hombre es la
cabeza, en el matrimonio. Y los vamos a clasificar en
cuatro características:
I.- EL MARIDO DOMINANTE
1ª de Reyes 12:1-5
“Roboam
fue a Siquem, porque todo Israel había venido a Siquem para hacerle Rey. Y
aconteció que cuando lo oyó Jeroboam, hijo de Nabat, que aún estaba en Egipto,
a donde había huido de delante del rey Salomón y habitaba en Egipto, enviaron
a llamarle. Vino, pues, Jeroboam, y toda
la congregación de Israel, y hablaron a Roboam, diciendo:Tu
padre agravó nuestro yugo, mas ahora disminuye tú algo, de la dura servidumbre
de tu padre, y del yugo pesado que puso sobre nosotros, y te serviremos. Y Él les dijo; idos y de aquí a tres días volved a mí. Y el pueblo se fue”
El pueblo le pedía, disminuyera sus cargas, que Salomón había impuesto,
y así le servirían al nuevo rey, y él les pide que al tercer día regresen y les
dará una respuesta.
1ª de Reyes 12:6-15
El rey les contestó, de acuerdo al consejo de los jóvenes, que se habían
criado junto con él, es decir desechó el consejo de los ancianos, que habían
estado con su padre, en pocas palabras había hecho su voluntad.
Aquí nos describe la biblia a un hombre dominante, que como rey, que era,
quiso imponer su voluntad.
Y ¿Cuántos de nosotros hacemos nuestra voluntad?, no tomamos en cuenta, ni
siquiera la opinión de nuestra esposa, nos volvemos tiranos, en nuestros
hogares, porqué solamente nuestra voluntad cuenta, y nada más.
Mateo: 20:25-28
“Entonces Jesús llamándolos, dijo: Sabéis que los
gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y los que son grandes
ejercen sobre ellas potestad, mas entre vosotros no será así,
sino el que quiera hacerse grande entre vosotros, será vuestro servidor. El que quiera ser primero entre
vosotros será vuestro siervo, como el hijo del hombre no vino
para ser servido, sino para servir, y dar su vida en rescate por muchos”.
Aquí el Señor, nos dice, que tenemos que servir, no ser servidos, el
hombre que cree en Cristo, en su matrimonio, tiene que servir, de común acuerdo
con su esposa, no a imponer, sino a dialogar y tomar la mejor decisión.
2ª Corintios: 13:10
“Por esto os escribo estando
ausente, para no usar de severidad, cuando esté presente, conforme a la
autoridad que el Señor, me ha dado para edificación, y no para destrucción”.
El Apóstol Pablo, nos dice que
el Señor nos dio autoridad para edificación, y el hombre cuando es
dominante destruye su hogar, porque no hay otra opinión más que la de Él.
1ª de Pedro 5:3
“No como teniendo señorío sobre
los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplo de la grey”
No que tengamos señorío, con los que están a nuestro cuidado, sino
siendo ejemplo, y que es señorío, es dominio.
ACAB, es la descripción del marido pasivo, y al unirse con una mujer de
carácter, y cuando esto se da, se convierte en una bomba matrimonial.
Ya sabemos la historia de Acab y Jezabel, mujer muy bonita pero muy
mala, y empieza a tomar decisiones por su marido, y el que mandaba ya no era el
rey Acab, sino ella, y este tipo de hombres terminan por ser despreciados por
la mujer. Porque la mujer quiere ser protegida por su marido, defendida, y no
ser ella la que tome las decisiones.
Y esto lo vemos cuando el hijo pide permiso, para algo, dile a tu mamá,
es decir delega la autoridad en la mujer, y termina por destruir el matrimonio.
Génesis: 3:16
“A la mujer dijo: Multiplicare en gran manera tus
dolores de tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos; y tu deseo será para
tu marido, y él se enseñoreará de ti”.
Desde el inicio, Dios dijo estas cosas, el deseo
de la mujer es para su marido, y el tendrá señorío sobre de ella.
El marido pasivo es aquel, que no le interesa
las decisiones del hogar, ahí que la esposa las tome, eso no es lo que Dios
dijo.
Sin embargo la mujer cristiana, debe de tener la
sabiduría de hacer de su marido pasivo a activo, devolver su señorío, para que
el matrimonio camine como Dios lo dijo desde el principio.
III. EL
MARIDO INMORAL
2ª de
Samuel: 11:2
“Y sucedió un día, al caer la tarde, que se levantó
David de su lecho y se paseaba sobre el terrado de la casa real, y vio desde el
terrado a una mujer que se estaba bañando, la cual era muy hermosa. Envió
David a preguntar por aquella mujer, y le dijeron: aquella es Betsabe, hija
de Eliam, mujer de Urías heteo”
Aquí sabemos la historia, que David durmió con
aquella mujer, y quedó embarazada, al saber esto, David mandó llamar a Urías, y
le dio instrucciones de que descansara, que durmiera en su casa, mas Urías, no
lo hizo, porque no podía descansar mientras sus compañeros estaban en guerra.
¿Qué hizo David? dio instrucciones de que dejaran
sólo en el frente de la batalla a Urías, para que el enemigo lo matara y así no
sentirse culpable de su muerte.
Y este pasaje, nos describe al hombre inmoral,
que no respeta su hogar, ni el hogar ajeno. Aquella mujer tenía su propio
marido, mas sin embargo David, se allegó a ella sin importarle eso.
Hebreos: 4:13
“Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su
presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos
de de aquel a quien tenemos que dar
cuenta”
Es decir todo lo que hagamos, están visibles a
los ojos de Dios, nada podemos ocultar, y a David le envió por medio de Natán
la parábola del hombre que tenía sólo una oveja, y otro que tenía muchas, sin
embargo el que tenía muchas, le quitó a aquel que sólo tenía una, y que dice
David “ese hombre merece morir”.
Entonces Natán le descubrió, que aquel hombre
era él, que le había quitado la mujer a Urías, y esto no fue agradable a los
ojos de Dios, y el producto de aquella falta, tubo que morir, cosa que causó
gran pesar a David.
La diferencia es que David se arrepintió, de
aquel hecho, pero el hombre actual inmoral no se arrepiente de sus faltas, y
termina por destruir su hogar.
Salmos: 139:1-4
"Oh
Jehová, tú me has examinado y conocido. Tú
has conocido mi sentarme y levantarme; has entendido desde lejos mis
pensamientos, has
escudriñado mi andar y mi reposo, y todos mis caminos te son conocidos. Pues
aún no está la palabra en mi lengua. Y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda"
Dios sabe todas las cosas que pasan por nuestras
mente y corazones, y aún la palabra antes de decirla, él sabe
.
Proverbios: 5:18-23
“Sea
bendito tu manantial, y alégrate con la mujer de tu juventud, Como
sierva amada y graciosa gacela, sus caricias te satisfagan en todo tiempo, y en
su amor recréate siempre. ¿Y
porqué hijo mío andarás ciego con la mujer ajena, y abrazarás el seno de la extraña? Porque
los caminos del hombre están, ante los ojos de Jehová, y Él considera todas sus
veredas. Prenderán
al impío, todas sus iniquidades, y retenido será con las cuerdas de su pecado. Él
morirá por falta de corrección, y errará por lo inmenso de su locura”
Entonces que nos recomienda la escritura, que
desde el inicio de nuestro matrimonio, seamos fieles, que no gocemos en el, con
la mujer propia y no con la ajena o extraña, ya que todos nuestros caminos
están bajo los ojos de Dios, y también ve nuestras veredas
Y el que falta a su hogar, es un impío, a quien
sus propias faltas lo prenderán y será atado con las cuerdas del pecado, y
morirá por falta de corrección, espiritualmente hablando, y por esas locuras
andará en el error.
IV.- EL
MARIDO DISTRAÍDO
¿Cuál es este tipo? Es aquel que no sabe enumerar
las prioridades.
1ª Dios
2ª Esposa
3ª Hijos
4ª Ministerio
5ª Trabajo
Es decir primer lugar está nuestra relación con
Dios, ella está por sobre todas las cosas, pero cuando no sabemos nuestras
prioridades, perdemos el rumbo, y el hogar,
trabajo, trabajo, y nos olvidamos del hogar, o a Dios lo dejamos, para
cuando haya tiempo, etc.
Lucas 21:34-36
“Mirad también por vosotros mismos, que nuestros
corazones no se carguen de glotonería y embriaguez y todos los afanes de esta
vida, y venga de repente sobre vosotros aquel día. Porque
como un lazo vendrá sobre todos los que habitan sobre la faz de toda la tierra. Velad,
pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar, de todas
estas cosas que vendrán, y de estar de pie delante del hijo del hombre”
El Señor Jesús nos previene de que tengamos
cuidado, de no embriagarnos de las cosas materiales, no sea que venga de
repente aquel día, y nos encuentre lejos de las cosas de Dios.
CONCLUSIÓN
Hermanos, pongamos en orden nuestra vida, y si
caemos en alguno de estos conceptos, pidamos a nuestro Dios, para salir
inmediatamente, y estemos preparados, no sea, que como dice Lucas, venga aquel día
y nos encuentre distantes de las cosas de Dios, porque nadie tenemos asegurado,
el día de mañana, y el que este en
las cosas de Dios, también nos exhorta el señor a velar y orar, para que seamos
dignos de estar de frente con el Señor, porque como dice el Apóstol Pablo a los
Corintios en su primera carta:
“ASÍ QUE, EL QUE PIENSA ESTAR FIRME, MIRE QUE NO
CAIGA”
1ª Corintios 10:12
Obr. Apolinar García.
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